Cuando la primavera empieza a asomar, nuestro espíritu nos pide sol y aire libre. El mes de marzo es el mejor momento para depurarse del invierno y realizar una escapada a la Finca El Cercado en plena época de floración de almendros y rosales
Después del largo invierno, cuando las primeras flores reciben los rayos del sol, nuestro cuerpo y nuestro espíritu -que no son ajenos al influjo del tiempo- nos piden salir a la calle, relajarnos, respirar. Llega la primavera: tiempo para depurarse del estrés y recargar energías.
La Finca El Cercado es un remanso de paz y naturaleza donde sólo el canto de las aves rompe el silencio del campo castellano. En las primeras décadas del siglo XX nuestro abuelo, amante de la naturaleza, sembró cientos de almendros en las 50 hectáreas de extensión de la Finca, procurando su cuidado para que nos regalaran ricas almendras y preciosas flores.
Hoy, esos almendros se conservan grandes y fuertes. Alzan al cielo sus poderosas ramas, que en esta época comienzan a llenarse de flores.
No podemos describir aquí la grata sensación que te recorre cuando paseas entre nuestros almendros… ¡Hay que vivirlo!
En esta época, además, los rosales comienzan a desplegar toda su belleza. Los miles de matices que ofrecen sus pétalos de colores son un deleite para los sentidos.

Las plantas aromáticas son otra de las especies que más abundan en la Finca El Cercado. Su aroma nos acompaña durante todo el paseo.

Rutas por la naturaleza desde nuestra Finca:
Vía Verde del Tren Burra:
Lo llamaban «tren burra» por la lenta velocidad con la que discurría. Seguro que esa lentitud no molestaba a sus pasajeros, pues les permitía deleitarse en el paisaje de Tierra de Campos. Los vestigios de la vía del Ferrocarril Secundario de Castilla, que transcurrió entre Palencia y Villalón de Campos desde el siglo XIX hasta los años 60 son hoy en día una fantástica vía verde que se puede recorrer a pie o en bicicleta. El sendero comienza en la Dársena del Canal de Castilla en la capital palentina, en el Ramal Sur, y discurre por el camino de sirga durante 5 kilómetros hasta enlazar con la antigua plataforma de la vía del tren en la esclusa Treinta del Canal de Castilla. En ese punto, el sendero entra en la antigua infraestructura ferroviaria y continúa pasando por las estaciones de tren de Villamartín, Mazariegos, Baquerín y Castromocho, finalizando el recorrido enlazando con el Ramal de Campos del Canal de Castilla.
En el recorrido disfrutaremos de un paisaje singular y conoceremos algunos de los edificios de sus estaciones en Villamartín o Mazariegos, junto a la que se ha levantado una moderna torre observatorio de Campos ya que este camino natural se adentra en pleno corazón de esta comarca con una extensa estepa cerealista salpicada de históricos pueblos con iglesias de altas torres que dominan el paisaje y en la que destacan municipios como Fuentes de Nava.

