El ‘slow travel’, o turismo lento, es una filosofía de viaje que busca romper con la prisa y la superficialidad, que invita a los viajeros a sumergirse de manera más profunda en las experiencias y las culturas de los destinos que visitan. Una manera diferente de vivir y de sumergirse en el lugar que se visita. Y en Finca El Cercado nos encanta esta nueva tendencia que está atrapando a tantos viajeros en los últimos años. Porque, en lugar de centrarse únicamente en la meta, el ‘slow travel’ pone énfasis en el proceso y aboga por una conexión más auténtica con los lugares y las personas.
Un paso más para tratar de comprender el mundo y, en el camino, entendernos un poco más a nosotros mismos. Además, este nuevo concepto nos invita a parar y disfrutar más de las cosas, saboreándolas sin tener que pasar de un estímulo a otro rápidamente.
¿Quieres saber más del ‘slow travel’? Pues en Finca El Cercado te invitamos a conocer todo sobre él.
¿Dónde nace?
El concepto de ‘slow travel’ o viaje lento tiene sus raíces en la filosofía del movimiento ‘slow’ que comenzó en Italia en la década de 1980 con el término ‘slow food’, que nació como respuesta al auge de la comida rápida y la industrialización de la alimentación. Desde el comienzo, se apuesta por la valoración de la comida local, la producción sostenible y la apreciación de la experiencia gastronómica.
Si bien Italia fue el lugar de origen del movimiento ‘slow’, la idea de viajar lentamente ha ganado popularidad en todo el mundo a medida que más personas buscan experiencias más auténticas y profundas al explorar nuevos destinos. El slow travel se opone a la prisa y al turismo superficial, fomentando una conexión más profunda con los lugares que se visitan.
¿Qué es ‘slow travel’?
El ‘slow travel’ es una de las últimas tendencias entre los viajeros, que ya no quieren correr de un sitio para otro, y, además, está muy ligado al turismo rural, de campo. Pero no os hacemos esperar más y pasamos a contaros qué es esta manera de viajar.
Disfrutar
Una de las características fundamentales del ‘slow travel’ es la idea de disfrutar del viaje tanto como del destino. Esto implica adoptar una mentalidad menos orientada a las listas y a todo lo que hay que ver hoy para centrarse en la calidad de la experiencia. En lugar de apresurarse de un lugar turístico a otro, los viajeros que practican el ‘slow travel’ prefieren tomarse el tiempo necesario para explorar y sumergirse en la vida cotidiana local.
Vida local
El compromiso con la comunidad es otro pilar del ‘slow travel’. Los viajeros buscan interactuar con los residentes locales, participar en actividades culturales y apoyar negocios locales. Esto no solo contribuye al desarrollo sostenible de las comunidades, sino que también permite a los visitantes tener una perspectiva más auténtica y significativa de la vida en ese lugar.
Además, los viajeros que no quieren tener prisa quieren aprender la cultura local de cerca, con actividades y tomas de contacto entre el pasado y el presente.
Sostenibilidad
La sostenibilidad es una preocupación central en el ‘slow travel’. Los practicantes de esta filosofía buscan minimizar su impacto ambiental y por eso eligen opciones de transporte más sostenibles y optan por alojamientos en el campo. Y es que son conscientes de que sus acciones pueden ayudar a preservar el paisaje y la biodiversidad. Los viajeros tranquilos también disfrutan con actividades ligadas a la tierra, desde el enoturismo a la búsqueda de setas.
Lejos del bullicio
La exploración de lugares menos conocidos es otra faceta de los viajeros que apuestan por la tranquilidad. En lugar de dirigirse a los destinos turísticos más populares, los viajeros buscan joyas ocultas y experiencias auténticas fuera de las rutas tradicionales.
Esto no solo proporciona una sensación de descubrimiento al viajero, sino que ayuda a las zonas rurales a poner en marcha una actividad económica fundamental para sus habitantes..
Sin prisas
La mentalidad de ‘slow travel’ también aboga por itinerarios flexibles. Estos viajeros no quieren tener los días llenos de actividades programadas, quieren poder permitirse momentos de espontaneidad y adaptación. Esto permite sumergirse en experiencias inesperadas y de aprovechar las oportunidades que surgen en el camino. Y es fundamental para disfrutar de la experiencia, sin prisas, sin reloj y sin la necesidad de cumplir una lista al final del día.
Siempre rural
La conexión con la naturaleza y el entorno es otro aspecto crucial del ‘slow travel’. Los viajeros buscan apreciar la belleza del paisaje, participar en actividades al aire libre y desarrollar un respeto más profundo por la tierra que visitan.
En Finca el Cercado
Y todas y cada una de las características de esta filosofía viajera se pueden encontrar en Finca El Cercado. Nosotros fomentamos la conexión auténtica con las culturas locales, la sostenibilidad ambiental, la exploración fuera de las rutas turísticas tradicionales y el disfrute de la belleza natural. Al adoptar esta mentalidad, los viajeros pueden experimentar un enriquecimiento más profundo y volver a casa con experiencias inolvidables.